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martes, 21 de diciembre de 2010

Habilidades sociales

Existen una serie de conductas, pensamientos y emociones que aumentan las posibilidades de que mantengamos relaciones interpersonales que nos sean satisfactorias y que a su vez, nos ayuden a conseguir que las otras personas no impidan que logremos nuestros objetivos. A lo antes descrito lo denominamos Habilidades Sociales (HHSS).
Otra definición podría ser la capacidad de obtener el máximo de beneficios en las relaciones con otras personas, con el minimo de consecuencias negativas para nosotros (tanto a corto como a largo plazo).
Como podemos observar, las habilidades sociales son importantes en nuestra vida por diferentes motivos como:
  • Las relaciones con los demás pueden ser una fuente de bienestar, pero tambien pueden ser la mayor causa de estrés y malestar si no las manejamos de forma adecuada para nosotros.
  • Las relaciones interpersonales ayudan a mejorar (o perjudicar) nuestra autoestima. Todo depende de cómo las llevemos a cabo.
  • Unas habilidades sociales inadecuadas nos lleva a sentir emociones negativas (frustración, ira, etc.) e incluso puede llevarnos a sentirnos rechazados, menospreciados o poco atendidos por los otros.
  • Si tenemos pocas habilidades sociales seremos más propensos a padecer alteraciones psicológicas como, depresión o ansiedad, e incluso enfermedades psicosomáticas.
  • Ser hábil socialmente nos ayuda a incrementar la calidad de vida, ya que ayuda a que nos sintamos bien y a conseguir lo que ansiamos con menos esfuerzo.
Las habilidades sociales incluyen diversos componentes, como la comunicación verbal y no verbal; rechazar o realizar peticiones; resolución de conflictos interpersonales; etc.
Desde la psicología conductual se consideran tres dimensiones distintas en las habilidades sociales:
  • Las conductas observables externamente. Aqui hemos de tener en cuenta todo lo que podemos ver y que pueden ver de nosotros como la mirada, la expresión facial, la forma y contenido de lo que hablamos, los gestos, etc.
  • Los componentes fisiológicos. Como el enrojecimiento de nuestras mejillas ante una situación vergonzosa para nosotros, el nerviosismo, etc.
  • Los aspectos cognitivos. Es decir, las creencias pensamientos e imágenes mentales que damos a la situación vivida. En los últimos años se da cada vez más importancia a estos aspectos ya que se considera que juegan un papel determinante en la forma en que percibimos y evaluamos la realidad.
En general, si somos capaces de conjugar bien estos aspectos, seremos capaces de tener unas buenas habilidades sociales, y con ello, conseguiremos un aumento en nuestra autoestima que nos llevará a la consecución de nuestras metas atendiendo a los aspectos necesarios para ello.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Cuidado con el cannabis... afecta a nuestro cerebro.

El consumo a largo plazo de altas dosis de cannabis podría estar asociado con anomalías estructurales de las áreas cerebrales del hipocampo y la amígdala, según un estudio de la Universidad de Melbourne y la Universidad de Wollongong.

Los autores explican que existen evidencias controvertidas sobre los efectos a largo plazo del consumo de cannabis. Añaden que a pesar de que cada vez existen más estudios que sugieren que el consumo de cannabis a largo plazo está asociado con un amplio rango de efectos secundarios graves para la salud hay mucha gente que piensa que es relativamente inofensivo y que debería ser legalizado.
Los investigadores, dirigidos por Murat Yücel, realizaron imágenes de resonancia magnética estructural de alta resolución realizadas en 15 hombres con una media de edad de 40 años que habían fumado más de cinco cigarrillos de marihuana al día durante más de 10 años. Sus resultados se compararon con imágenes de 16 individuos, con una media de 36 años, que nunca habían consumido cannabis. Todos los participantes realizaron una prueba de memoria verbal y fueron evaluados en relación a un umbral de síntomas por debajo del estándar del diagnóstico de enfermedad de trastornos psicóticos, que incluye la esquizofrenia y la manía.

El hipocampo, que se cree regula la emoción y la memoria, y la amígdala, que participa en el las emociones que experimentamos, tendían a ser más pequeños en los consumidores de cannabis que en los controles con un volumen reducido en una media del 12 por ciento en el hipocampo y del 7,1 por ciento de la amígdala.

El consumo de cannabis también estaba asociado con un subumbral de síntomas de trastornos psiquiátricos. Los autores señalan que aunque los consumidores de cannabis mostraron una realización peor que los controles en aprendizaje verbal, esto no estaba asociado con los volúmenes cerebrales regionales en cada grupo.

Según los investigadores, estos descubrimientos retan la percepción extendida de que el cannabis no tiene secuelas neuroanatómicos o son limitadas. Los autores señalan que aunque un consumo bajo podría no conducir a efectos neurotóxicos significativos, estos resultados sugieren que el consumo elevado diario puede ser tóxico para el tejido cerebral humano.

Los científicos indican que es necesaria una mayor investigación para determinar el grado y los mecanismos asociados al consumo a largo plazo del cannabis y el curso temporal de la recuperación neuronal después de la abstinencia, pero lo que evidencian los experimentos realizados es que, el consumo de cannabis tiene importantes repercusiones en nuestro cerebro.

Fuente: revista "Archives of General Psychiatry".

martes, 14 de diciembre de 2010

El flaming en la red

Un flame consiste en un mensaje deliberadamente hostil o insultante enviado sin ningún propósito constructivo; en consecuencia, flaming es el acto de publicar usualmente en el contexto social de un foro o una lista de correo electrónico, y aquel que los envía, recibe el nombre de flamer.
A veces se publican como respuesta a un cebo, un mensaje provocativo, pensado especialmente para generar respuestas insultantes, aunque en otras ocasiones es simplemente porque no ha gustado lo que se había escrito o porque se tiene la necesidad de insultar al otro por su opinión. La mayoría de las veces los flames son mensajes enfadados o insultantes, enviados por personas con sentimientos muy fuertes respecto a un tema.
Sin embargo, algunos consideran el flameo como una forma estupenda de descargar tensiones y relajarse, aunque la parte receptora seguramente quede mucho menos satisfecha. Hay ciertas características de las comunicaciones electrónicas como por ejemplo el anonimato , que pueden ser originadoras de flame wars (guerra de flame). Estas guerras se inician, en muchas ocasiones, por la dificultad de interpretar los mensajes recibidos con las mismas intenciones que el que lo ha enviado. No es fácil transmitir por esa vía las expresiones faciales o entonaciones de voz que pueden usarse para moderar el tono de un mensaje en la comunicación oral.
Las pocas restricciones que ofrece el ciberespacio ofrece una desinhibición en determinadas personas que pasan a expresarse de formas que nunca lo hubiesen imaginado. De hecho, cuando una persona envia un flamer a otra, al verse fíisicamente esta es demasiado tímida para retomar ese mensaje y aclarar la situación, lo que puede provocar una tensión en la relación de ambas personas.
No hay un acuerdo general sobre las causas del flameo, aunque un estudio reciente ha llevado a algunas pruebas concluyentes en alguna forma. Algunas hipótesis comunes son:
1. El egocentrismo nos lleva a pensar que entendemos el tono de un redactor el 90% de las veces, aunque solo acertamos aproximadamente el 56% del tiempo. Eso lleva a malinterpretaciones sobre la intención del redactor, causando guerras de flames y discusiones intensas.
2. La falta de lenguaje corporal y tonos de voz en las comunicaciones electrónicas escritas hacen difícil representar las emociones, y el relativo anonimato induce a considerar menos peligroso el uso de un lenguaje encendido.
3. En foros y chats, no hay otra forma de expresar la propia opinión que escribir. No escribir tiende a ser interpretado como "rendirse", lo que tiende a alargar artificialmente las discusiones. Del mismo modo, las opiniones e ideas no expresadas durante mucho tiempo crean la sensación de que pueden ser olvidadas, creando la necesidad aparente de repetirlas, causando el mismo efecto.
4. Si bien es difícil que en el contexto de una discusión violenta alguna argumentación resulte convincente para quién piense sustancialmente diferente, estas funcionan como un refuerzo para quienes comparten dicho punto de vista. Esta perspectiva de triunfo parcial, alienta a sostener la continuidad de la violencia verbal.
Con los impulsos emocionales desinhibidos tecleamos un mensaje desafortunado y le damos a "enviar" sin siquiera repasarlo de forma más tranquila y esto puede llevarnos a comunicaciones poco afortunadas. Si nos acostumbramos a intentar no responder a los mensajes cuando estamos alterados y sobre todo, repasamos los mensajes poniendonos en el lugar de la persona que vaya a recibirlo, seguro que ayudamos a evitar el flaming en la red.
 
M.ª Carmen Maluenda Psicóloga y Psicoterapeuta

viernes, 10 de diciembre de 2010

Pensamientos rumiantes

En muchas ocasiones, determinados pensamientos que aparecen en nuestra mente nos ocasionan autenticos problemas debido a que no podemos evadirnos de ellos y esto nos causa un malestar dificil de manejar.
Cuanto más intentamos dejar de pensar en esos pensamientos.... más fuerza parece que adquieren y más difícil es conseguir dejar de pensar en ellos.
Suelen ser pensamientos asociados a problemas que tenemos en esos momentos, miedos que  nos acechan, inquietudes, malestares.... en general, los pequeños "fastidios" cotidianos.
La estrategias de proponernos no pensar mas en ellos hace que se hagan fuertes, y ¿entonces?, ¿que podemos hacer para evitar estas "molestias?
La respuesta es relativamente fácil... No atenderlos.
Otra cosa es el como conseguimos no atender a algo que nos preocupa enormemente o que tememos hasta bloquearnos....
Existen estrategias que pueden ayudarnos como la parada de pensamiento, la respiración, la relajación y algo más entretenido.... la distracción.
Un pequeño consejo. Cuando aparezcan estos pensaamientos comencemos inspirando profundamente y expirando muy despacio. (La expiración ha de durar al menos el doble de la inspiración para que sea efectivo).
Posteriormente, concentremos nuestra mente en la realización de algo que requiera nuestra atención como por ejemplo:
  • contar hacia atrás desde 100 de 8 en 8.
  • Intentar recordar algun evento que nos produjo emociones agradables. Para ello, hemos de intentar recordar la mayor parte de los detalles: con quien estabamos, donde estabamos, como ibamos vestidos todas las personas que estabamos en esa situación, que ocurria en ese momento..... Cualquier detalle pequeño es importante y conseguirá que centremos la atención en esa situación reviviendo las emociones sentidas en ese momento.
  • Iniciar una conversación agradable con una persona que esté cerca de nosotros o a quien llamemos por teléfono.
  • O cualquier otra estrategia que requiera una focalización atencional por nuestra parte.
Aunque al principio esos pensamiento aparezcan, si nos concentramos en la tarea que hemos iniciado, no tendremos problemas en conseguir que esos pensamientos rumiantes dejen de ser un problema para nosotros.

Autor: M.ª Carmen Maluenda

jueves, 9 de diciembre de 2010

Las personas optimistas viven mas...

El mejor fármaco para mejorar nuestra vida es la actitud positiva ante los acontecimientos que nos suceden.
Una frase de Bernabé Tierno (escritor y psicólogo) dice que "lo que hacemos nos hace y nuestros actos tienen consecuencias". Estas consecuencias serán positivas o negativas en función de la visión que tengamos sobre los hechos. Si somos positivos nos centraremos más en las posibilidades que mejores resultados nos reporten.
Charles Darwin decía que las personas que viven más y mejor son las que saben adaptarse mejor a los cambios. Así mismo, la sabiduría esencial dice que el ser humano tiene que disfrutar de cada momento de su vida, si bien es cierto que cada persona necesitará cosas distintas para ser felices. La felicidad es como un traje a medida para cada uno de nosotros, es un alto nivel de satisfacción con la vida que nos ha tocado vivir, sabiendo que el valor más importante es la vida y que el hecho de vivir por sí mismo ya tiene que hacernos felices. Si buscamos la felicidad en los grandes acontecimientos de nuestra vida, estamos abocados al fracaso, ya que estos se dan en muy contadas ocasiones. Una conversación placentera, un café con los amigos, un descanso, la sonrisa de un ser querido.... son esas pequeñas cosas que consiguen que seamos felices. También tendremos en cuenta que un mismo acontecimiento en una persona puede hacerle sentir mas fuerte y aprovechar la experiencia para crecer de manera emocional, mientras que a otra persona le puede hundir de por vida. Por ello, el afrontamiento positivo es una gran baza para mejorar nuestra visión de la vida.
El optimismo vital, siempre que este sea desde una visión realista, juega un papel importante ya que desde esta perspectiva se buscan las mejores soluciones posibles a los problemas. Una estrategia para reprogramar nuestros pensamientos es focalizar en nuestra mente situaciones positivas de nuestra vida. Pruebe a realizar este pequeño ejercicio y comprobará su propia mejoría.
El ser humano tiene que disfrutar de cada momento y adaptarse a su propia vida. Aprovechemos nuestras experiencias para mejorar nuestra vida...
Autora: Mª Carmen Maluenda Psicóloga y Psicoterapeuta
Fuente: Artículo basado en entrevista de La Vanguardia a Bernabé Tierno

Hipnosis clínica

La hipnosis puede ser considerada como una de las técnicas más antiguas que se conocen para provocar cambios en los procesos cognitivos, afectivos, psicofisiológicos, perceptuales y conductuales a través de la sugestión.En general, la hipnosis tiene una visión muy distorsionada debido al espectáculo lo que ha favorecido una visión sesgada y un mantenimiento de mitos y concepciones erróneas sobre qué es y cómo funciona.
Algunos de estos mitos:
  • El hipnotizador tiene un “poder especial” para inducir hipnosis. En absoluto, el hipnotizador no debe de tener otras habilidades que las propias de un buen terapeuta, además claro está de los conocimientos necesarios para desarrollar esa técnica.
  • El individuo hipnotizado no puede falsear el relato de una situación o acontecimiento. El material recordado al ser recuerdos emocionales de experiencias traumáticas puede ser inexacto, si bien su validez emocional es lo que más nos interesa y con lo que mas debemos trabajar, ya que, en muchos casos no es la propia experiencia lo que causa el trauma sino como valora y percibe la persona dicha experiencia.
  • En hipnosis, el sujeto realizará cualquier cosa que el hipnotizador le pida. El límite hasta donde se deja influir la persona lo fija ella misma.
  • La hipnosis supone la pérdida de control del comportamiento del sujeto. En todo momento el sujeto controla lo que puede o quiere dejarse influir.
  • La hipnosis requiere una actitud pasiva. Muy al contrario, el sujeto hipnotizado debe esforzarse en utilizar sus habilidades cognitivas con el fin de experimentar subjetivamente las modificaciones sugeridas.
  • La hipnosis crea dependencia. En principio podría crear dependencia si la propia persona no aprendiese las técnicas hipnóticas, algo que actualmente con la práctica auto-hipnótica puede soslayarse.
  • La hipnosis es peligrosa. No es peligrosa siempre que este tipo de técnicas sea realizada por profesionales con experiencia. Lo más importante de la hipnosis no es hipnotizar sino cómo utilizar las sugestiones hipnóticas adecuadamente durante una intervención terapéutica.
Su aplicación permite obtener resultados terapéuticos exitosos en menos tiempo y con un menor esfuerzo por parte de los pacientes. Utilizada de forma combinada con otras técnicas facilita y potencia la efectividad terapéutica de las mismas.